Me iba a dejar engañar.
Estaba visto.
Pero los engaños no duran,
mas que el peso de las palabras que los tejieron.
Y tu engaño lleva tantas palabras...
Se derrumba ante mí.
Y yo, triste, me deleito en su caída.
Siempre supe que lo mío eras tú.
A pesar de que duela.
A pesar de que engañe.
Ginie